Tiene una larga e interesante
historia. Sus orígenes remontan al siglo X-XI, siendo un Monasterio Benedictino. En el siglo XII el rey Alfonso
VI la donó al Abad del Monasterio de San Martín de Santiago pero su yerno Don Raimundo de Borgoña, esposo de Doña Urraca, nombrado gobernador General de Galicia y amigo
personal del Arzobispo Gelmirez le rogo al rey que revocase su donación, una
vez revocada, se la donó a Xelmírez. Pasados algunos años logro volver San
Martín Pinario y estuvo duante siglos bajo su custodia, primero como Monasterio
y luego como Priorato.
Estaba destinada a granja previsora de San Martín y según la tradición como casa correccional. De esta
época solo queda la parte abovedada, que debio ser capilla u oratorio del
pequeño Monasterio o “Monasteriale” como lo llaman losdocumentos medievales de
estilo románico. Actualmente se puede observar que todas las piedras están numeradas.
En el siglo XV – XVI paso a ser parroquia rural siendo patrimonio de la Real Colegiata de Santa María
de Sar. En el XVI – XVII se erige una nueva construcción que llega a nuestros días. Actualmente su aspecto es el de una casa señorial con fachada renacentista, sobre la que destaca una gran piedra armera sin esculpir.